sábado, 26 de julio de 2014

PACO, "EL PERITO SEVILLANO DE CAMPOEJIDO"

Quisiera tener más luces para poder expresar correctamente este sincero homenaje. 

Creo que es el primer amigo que se me va. Se me ha ido mucha gente conocida y muchos familiares directos, pero nunca me había pasado con alguien al que consideraba un amigo. No quiero volver a tener esa sensación, la vida no es justa, los hombres menos aún. Pero en Paco, por mucho que busque y rebusque en mi memoria, no encuentro un sólo pero o reproche que se le pudiera hacer. Una gran persona y un gran profesional, con gran empatía hacia el agricultor, nunca pensaba en vender, nunca en el interés de la empresa, siempre en el interés del campo. Y ese fué el gran activo, entre otros muchos, que afianzó la fidelidad de los agricultores hacia Campoejido.

Se ha ido de forma inesperada, sin llamar mucho la atención, sin que mucha gente se entere, sin molestar, como a el le gustaba. Se lo ha llevado "lo nuevo de ahora", como sabiamente me apuntó el anciano cuidador de los jardines del tanatorio, por viejo que sea.

Quiero hacer especial mención a Rosa y Juan Carlos, sus amigos del alma, que se han portado extraordinariamente acompañando a la familia en la enfermedad y en el duelo. Rosa me decía: "pero si el sábado por la noche estuvimos de cervezas juntos en un chiringuito de Almerimar .... sólo hace cuatro dias". Muy buenas persanas esta pareja.

En estas ocasiones uno dice muchas cosas, incluso obviedades y tonterias, como intentando abstraerte con la conversación y apartar de la mente el trágico desenlace, recordando a la persona en vida sin concluir que no la volverás a ver más ni volverás a disfrutar de tus afanadas discusiones políticas o simplemente mundanas que, por otra parte, había que provocarlas. No volverás a oir un elogio hacia tu vino salir de su boca.

Hacía algo más de ocho años que no salían lágrimas de mis ojos, en aquella ocasión fué por un motivo egoista, esta vez no, o eso espero.

En estas ocasiones pienso cuan necesaria sería la existencia de un Dios. 

Gracias Paco.

lunes, 14 de julio de 2014

MANO DE SANTO CONTRA ARAÑA ROJA

 
En la imagen se aprecian los sintomas de un ataque de araña roja. 
El género prunus, sobre todo melocotones y nectarinos, es muy propenso a los ataques de esta plaga. La abamectina y el azufre, cada vez menos eficaces para combatirla, tengo más esperanza en la lucha integrada, con depredadores naturales, para combatirla, sobre todo si hay frutos para consumo.    

En la foto anterior se aprecian mejor algunos individuos adultos. En otros post he hablado de enemigos naturales contra la plaga que aparecen espontáneamente cuando las condiciones lo permiten.

Mi buen amigo, y mejor técnico agrícola, Germán Aguilera me comentó en cierta ocasión que algunos problemas tienen una resolución más sencilla de lo que pensamos, me contó como combatir la araña sólo con agua ya que, según me dijo, estos insectos son antagonistas de la humedad. Entonces entendí porqué cuando llueve suelen desaparecer los focos de esta plaga.


¿Qué tenía que perder?, cogí la goma y le dí un buen "fregao", cual si un coche se tratara. Pues mano de santo, la población de araña descendió practicamente en un 90%, pienso que los huevos y las larvas pequeñas han fenecido totalmente. Una semana después repetí la operación y el árbol ha quedado practicamente limpio. Así de simple, sólo agua en abuncancia. No hay que regar y limpiar hoja por hoja, simplemente echar agua en cantidad para que chorree y dirigir, sobre todo, a la base de las ramas donde las arañas encuentran mejor refugio.

 

 Hace algunas semanas encontré este pájaro muerto cerca del cortijo, me llamó la atención porque era la primera vez que veía uno, no con ese aspecto sino tan grande, del tamaño aproximadamente de una charla. El maestro Aguilera me instruyó al mandarme un wasajo diciéndome que era una oropéndola. Siempre es gratificante ver que en la finca proliferan distintas especies de animales silvestres, encuentran un lugar de refugio aunque en esta ocasión ha sido de eterno descanso.